Fando y Lis de Arrabal
Guatemala city
Director: Jose Quintana Dubón
Fando y Lis viajan a Tar. Fando lleva a Lis, paralítica. En el carrito, mal atadas, todas sus cosas: un tambor, mantas, trastos inútiles… No están perdidos. Están cansados.
Entre ellos hay una relación de amor y afecto fraternal. Pero en Fando concurren unas nubes que de vez en cuando velan su entendimiento y le hacen comportarse con crueldad hacia Lis. Una crueldad que roza el sadismo. Lis se esfuerza por no contradecirle y no provocar esa crueldad. Pero esos accesos son impredecibles. Siguen su inútil viaje.
En su camino encuentran a tres curiosos personajes, Namur, Mitaro y Toso. Son justo lo contrario que Fando y Lis. Puro intelecto y fría visceralidad. Se contradicen obstinadamente con su lógica aplastante de forma que sus enfrentamientos dialécticos parecen no tener fin. Ni principio. A su modo también dependen los unos de los otros. Pero son incapaces de encontrarse entre ellos en un plano emocional. Fando, seducido por la inteligencia de estos tres caballeros, intenta mimetizarles para establecer con ellos una relación, mostrándose tan lógico y cabal como le es posible. Pero es inútil. Su intento es vano y sólo consigue que le tomen por un impostor. Entonces Fando cambia su estrategia y les muestra a Lis como un tesoro que compartir. Pero de nuevo sus intentos fracasan. La relación de Fando y Lis se va tornando más oscura y cruel conforme avanzan en su infructuoso viaje, hasta convertir su amor ingenuo y valioso en una injusta tragedia. Una crueldad sádica e inconsciente que lleva a Fando a encadenar a Lis y obligarla a arrastrarse. Su loco éxtasis ante los últimos esfuerzos de la indefensa mujer le lleva a matarla brutalmente…Namur, Mitaro y Toso encuentran el cadáver de Lis. Fando sigue solo su viaje. Ha sustituido a su compañera por una flor y un perro, como anunció al comienzo del espectáculo…